La donación de sangre está regulada por nuestro sistema nacional de salud, en la que se indica que la donación de sangre es voluntaria y no se comercializa.
La donación es segura, por lo que las instituciones de salud deben realizar varios análisis que garanticen que los hemocomponentes (
distintas partes de la sangre que se separan después de una donación para ayudar de forma específica a quienes más lo necesitan
están libres de enfermedades infecciosas.