Desde que los científicos James Watson y Francis Crick descifraron el código de la vida, décadas atrás, la forma de mirar nuestro organismo ha ido cambiando.
Este código secreto se esconde en nuestros genes, es único e irrepetible, y nos brinda la información necesaria para saber lo que traemos dentro incluso antes de nacer.
Hoy se puede diagnosticar en forma precoz diversas enfermedades y ayudar al médico especialista a tener un panorama preciso y confiable de lo que ocurre a lo interno de nuestro cuerpo.
La Biología Molecular es la medicina del futuro; basta una pequeña muestra de sangre para aportar al médico información valiosa y tomar decisiones clínicas acerca de cómo están sus pacientes.