
- Flora Orozco es una joven de 20 años, quien junto a su hermana Laura Orozco, pudo cambiar de manera positiva la historia de su vida y romper con los patrones sociales. Ambas son vecinas de Los Pinos de Tejarcillos, de Alajuelita, y como sabiamente lo describió Flora: "un precario donde hay muy pocas oportunidades, pero sí muchas ganas de salir adelante".
La joven, mientras brindaba sus servicios como voluntaria en una organización sin fines de lucro, se enteró del Programa de Acción Social del Hospital Clínica Bíblica, y de la Academia que el Hospital tiene para la formación de técnicos de la salud en el país, y fue así como aplicó para obtener una beca para formarse como Asistente Técnico de Atención Primaria (ATAP), en el Instituto Parauniversitario ASEMECO (IPA).
"Tuve mucha suerte de tener personas en mi vida que me apoyaron y me motivaron a seguir con el proceso de solicitud de la beca. Estuve esperando con muchas ansias la noticia y un día estaba almorzando con mi mamá y recibí una llamada, en la cual me dijeron que sí fui aceptada; nunca olvidaré ese día, la emoción fue muy grande. Lo único que recuerdo es haberme puesto a llorar y abrazar a mi mamá. Sabía que ese día era muy importante en mi vida, ya que desde ese momento empezaría la gran oportunidad de mi vida", relató Flora Orozco.
Su hermana mayor, Laura Orozco, también hizo todo el proceso; ella recibió esa llamada tan esperada un día después, “y la emoción fue igual”, contó.
Antes de iniciar la carrera en el IPA, las jóvenes asistieron a charlas y apoyaron al Programa de Acción Social en distintas actividades. “Para mí fue una experiencia muy bonita ya que conocí muchas personas a las cuales les tomé mucho cariño. Por ejemplo, doña Denia que siempre nos estuvo apoyando y nos aconsejaba; ella es una gran persona, a la cual le doy infinitas gracias por toda su preocupación y por toda la ayuda brindada durante todo este tiempo”, indicó Orozco.
"El Hospital Clínica Bíblica continua con la firme convicción de que la educación es una de las herramientas más efectivas en la generación del desarrollo social, personal y profesional, para nosotros es muy importante acompañar a los estudiantes en este plan de vida e impactarlos positivamente", subrayó la Sra. Laura Brenes, Directora del Programa de Acción Social.
Hubo momentos difíciles, compartió la joven, ya que en su casa viven 6 personas y entre ellos se turnaban para generar ingresos, a través de fletes, venta de comida o maquillaje, etc. “A veces llegaba a mi casa llorando por lo frustrada que estaba, había días que sólo teníamos los pases completos y no nos podíamos comprar nada para comer y así pasábamos hasta llegar a nuestra casa.”
Modelo por seguir
Todo esfuerzo trae su recompensa, y esto Flora lo sabe muy bien. “Cada día que llegaba a mi casa miraba a los niños que llegaban a las actividades que realizaba la organización sin fines de lucro en la cual yo era voluntaria; y ellos me decían doctora, o enfermera. Y no era nada de eso que yo estaba estudiando, pero desde ese momento me di cuenta de que era una inspiración para ellos”, complementó Flora.
Por último, Flora resaltó la importancia de no juzgar a las personas por el lugar donde viven, ya que hay muchos jóvenes que quieren salir adelante pero no tienen la oportunidad.
"Mi hermana y yo tuvimos la suerte de tener la ayuda de ustedes y tener la oportunidad de estudiar gracias a la beca de estudio que ustedes nos brindaron; es así como ya tenemos varios títulos del IPA y nuestro tan deseado y merecido título de ATAP. Por alianzas como estas es que podemos generar un impacto real e ir escribiendo una historia diferente", concluyó Flora.